Es mejor hablar la verdad que duele y sana, que una mentira que consuela y luego mata.

0
2254

Me molesta que me mintieras, me molesta porque confiaba en ti plenamente, porque a pesar de lo que todos me advertían yo prefería hacer caso omiso y estar bien contigo, me molesta porque me prometiste que no lo harías, me lo prometiste por aquello que según tu era lo más sagrado para ti, pero me molesta más aún que intentes evadir incluso la responsabilidad de tus mentiras y que ahora me salgas con que “lo hiciste por mí”, que me creas tan estúpida como para todavía tragarme esa tontería de que mentiste por mi bienestar y no tanto por tu cobardía.

Lo siento, pero no puedes pretender que lo has hecho por mí, así que al menos al final deberías tener el valor de admitir tus propios errores, porque si con eso intentas confundirme créeme que no lo lograrás, imagino que después de haberme engañado todo este tiempo creerás que soy una idiota, y en parte lo soy, no porque me creyera tus mentiras si no por haberte escogido, porque tus mentiras fueron certeras gracias a que yo te amaba y decidí darte mi confianza, si no descubrí tus mentiras antes no fue por falta de intelecto o porque fueras un gran mentiroso, fue sencillamente porque yo había decidido confiar en ti, y es que para que una relación florezca no hay otra forma que entregar el corazón y la confianza al amado, ya que si no lo haces, desde un principio estarás predisponiendo la relación a su fracaso, y si soy estúpida fue simplemente por haberte elegido a ti y nada más.

Desde un principio te advertí que no toleraba los engaños, y que si querías a alguien más bastaba con decirlo e irte, pero obviamente sabías lo que ponías en riesgo, sabías que no era fácil encontrar a una mujer como yo, alguien que te diera un trato digno a pesar de tus muchas carencias, alguien que te amara y te diera el calor de un hogar, alguien que te apoyara y siguiera contigo a pesar de los malos momentos, y a pesar de que tú tampoco eras un hombre perfecto yo nunca busque a nadie para cubrir tus carencias.

 

Nunca tuve una aventura como las tuviste tú, y vaya que no hubiera sido difícil encontrar a alguien que cogiera mejor que tú, pero yo sabía que a pesar de que ese no era tu punto fuerte hay otras cosas que son más importantes, entre esas la virtud de un matrimonio, el apoyo y el amor, cosas que tu no valoraste lo suficiente y que a partir de ahora ya no tendrás, ve a contarle tus mentiras a alguien más porque a mí me han matado todo lo que alguna vez sentí por ti.

Autor: Sunky