Necesito cerrar esta herida

0
1569

Aún tengo guardado tus caricias y tus besos, esos besos que nunca olvido y que cada día mi hijo tu hijo me los recuerda.

Estaba aferrada a la idea de que un día volverías, te he estado esperando cada día de mi vida, desde aquel viernes que te fuiste, he esperado a que volverías, a que volverías a nuestro nido a nuestro amor a nuestro mundo y universo. Anhelé que llegara ese día que estarías con nosotros, y aún sigo anhelando ese momento.

Quizás, te has olvidado ya de mí, que ya no recuerdas mis risas, ni mi sonrisa, que has olvidado el color de mis ojos y como ondulaba mi pelo con el viento. Quizás olvidaste como se entrelazaba mi alma con la tuya, y como sonaba mi corazón en cada latido tuyo. Has olvidado tal vez ese día, que prometimos ser eternos y nunca separarnos. Y aquí estamos, yo amándote como el primer día, tu olvidando lo que fuimos.

No he podido olvidar el ayer, ni he podido cerrar esa etapa contigo en mi vida y menos poder pasar página y comenzar un libro nuevo.

¿Te acuerdas de nuestra canción?  “Con los ojos cerrados amándonos volando en un beso viviendo de este amor que están puro y real de este amor que se puede tocar» Yo siempre la escucho y tus recuerdos vienen a mi mente espero que aún recuerdes esa tarde donde bailamos los dos solos al son de » Ven tú y alárgame la vida. Ven tú y cúrame está herida. Ven tu que por fotografías no puedo tocarte y mucho menos darte amor» Y luego fui tuya, como tantas veces lo he sido como tantas veces lo sería.

Él se parece tanto a ti, como yo soñaba que sería, así fue, y así es el , tan tú, no sé si te acordarás de las  caricias en mi barriga cuando aún eran pocas semanas,  el debate de que sería, el día que cocinando salieron dos huevos e imaginamos que serían gemelos, la emoción de la primera ecografía, el día que supe que sería un varón y que sería el amor de mi vida, eso lo llevo tatuado en mi pecho, como hubiese querido que hubieras compartido conmigo lo que ahora compartes con ella, el ver crecer a tu hijo en mi vientre, cada vez que pateaba mi barriga y las veces que se movía de un lado para otro. Como hubiese querido que el día que nació hubieras estado tú, para cogerle y acariciarlo, fue tan hermoso ese momento, el día que me enamoré del que sería el amor de mi vida.

Creo que es el momento de poner punto final a nuestra historia de amor, pero es tan difícil querer olvidarte, no puedo más, estoy cansada de querer esperarte, de amarte y querer olvidarte. Mi corazón llora, quizás hemos perdido los dos, pero yo he salido victoriosa, he ganado el amor de mi hijo que me recuerda tu amor.

Por: Mel