El único amor imposible que existe es aquél que te ha dejado claro que NO TE AMA.

0
8260

No hay amores imposibles, es simplemente que tus ojos no vieron al indicado.

 

¿Quién no ha tenido un amor imposible? Yo creo que todos alguna vez nos hemos enamorado de alguien “inalcanzable” o que al menos así lo hemos sentido. 

Pero bueno, empecemos por tratar de entender a que le llamamos “amores imposibles”, porque si lo vemos desde varios puntos de vista, podría ser la típica historia de amor entre ricos y pobres, o quizá aquél en que la apariencia física entre uno y otro es muy notable, o qué tal cuando te enamoras de alguien que vive al otro lado del charco, o peor aun, cuando te enamoras de alguien que ya esta comprometido o en una relación seria. Lo cual en cualquiera de estos casos se tiene la posibilidad de luchar por estar juntos (eso sí, con todas las consecuencias que esto conlleva). Por lo cual llego a una sola conclusión, el único amor imposible que existe es aquél que te ha dejado claro que NO TE AMA.

Es aquí donde hago referencia a la frase de Paulo Coelho que dice: “No existen amores imposibles, sino personas incapaces de luchar por él”, y me gustaría decirles que es verdad, que no existen, que sólo existen amores muy difíciles de llevar adelante o de alcanzar. Que lo imposible sólo es patrimonio de los que están cansados de intentar. Pero, es un poco insensato decir eso, al menos así lo creo. Porque por supuesto que hay amores imposibles, y lo que es peor, inadecuados.

Te pondré un ejemplo, imagina que eres amante de los animales y por “casualidades” de la vida, conoces a alguien sorprendente, de gran belleza, muy inteligente y, digamos que hasta cierto punto, de buenos sentimientos, te enamora y tú realmente anhelas amarle… Pero, ¡ups! resulta que le gusta patear perros y pisotear gatos. ¿Basta tu sentimiento para estar con esa persona?, ¿vale la pena ir en contra de lo que crees, de tus propios valores? Eso es un verdadero amor imposible, porque tendrías que pisotear tu amor propio para lograrlo. Tendrías que reventarte a ti mismo. ¿Cómo quieres amar si no te amas, si simplemente vas contra ti y cometes actos contra ti mismo?

Visto así, puede resultar un poco cruel, pero a veces es necesario que no suceda porque lo que verdaderamente te mereces no es eso, es algo mejor. Tal vez me he puesto un poco mística, pero tengo muchísimo respeto a mi destino y creo que todo pasa por alguna razón, lo que no… también; y la experiencia siempre me dice que al final es por un bien mejor.

La sociedad desde que somos muy pequeños nos ha enseñado en las películas, series, caricaturas, o por enseñanza de familiares y amigos que en cuestiones de efecto, nada es imposible, que quien se esfuerza consigue lo que sea por lo que luche y anhele de corazón. Llega esa edad, ese momento en que ¡uf!, el impulso del amor es inevitable. Tanta energía en nuestra alma anhelando dar amor nos hace, en muchos casos, fijarnos en gente que simple y sinceramente no nos puede amar, no son indicados para nosotros.

Y como consecuencia de eso, caemos en una inagotable y cansada lucha por obtener el amor de esa persona, nos obsesionamos, nos cegamos y no miramos mas allá de nuestros ojos. Creemos que algún día lo conseguiremos, que tanto esfuerzo tiene que tener recompensa. Sin embargo esa lucha sólo nos trae lagrimas, desilusión y, sobre todo, mucho dolor. Y seamos sinceros, ni todo eso logrará que esa persona te ame.

Todos sabemos que el verdadero amor, es aquél que te llena de plenitud, no te diré que no causa dolor ni sufrimiento, puede ser que sí, pero no porque la persona no te ame, simplemente porque en algún momento habrá circunstancias difíciles que enfrentar.

¿Será más bien que nos aferramos a esos amores imposibles por un orgullo insano y un ego lastimado? Podría ser, existen personas que no saben y no les gusta perder, no quieren renunciar a lo que quieren, aun a costa de ser dañados.

 

 

Nos estancamos en un lugar sin sentido, sin darnos cuenta que la vida esta hecha para disfrutarla, para vivirla, para reír, para ser feliz. Nos olvidamos de diferenciar lo que queremos de lo que en verdad necesitamos. Algunos más creen que estos amores son más sinceros, porque no esperan nada a cambio. Sólo aman y ya, son felices amando sin recibir nada, en ese anhelo imposible. Pero yo creo realmente que nadie hace nada sin esperar algo a cambio, hasta una madre espera que sus hijos sean felices. Es lógico que si das fidelidad, esperas fidelidad. Si das confianza, esperas confianza. Si das amor, esperas amor.

Ahora, si eres feliz dando amor a manos llenas cuando lo único que recibes son rechazos, “yo no te amo”, cuando lo que recibes es indiferencia y aun así continuas, y eres feliz, pues hazlo… Pero no sé qué diablos estás haciendo, eso es una gran automutilación: “Ámate primero, antes de amar”…

¿De verdad vale la pena un amor así, sólo por demostrarte a ti mismo que puedes luchar por el amor de alguien porque crees que ese alguien es el amor de tu vida? Recuerda que a veces, aunque el zapato esté bonito, muchas veces no es de tu talla. Esa actitud es poco saludable, además de resultar una perdida de tiempo, porque… ¿quién dice que no hay por ahí un amor posible? Uno en donde el sentimiento sea recíproco.

Ahora, es diferente cuando ambas personas se aman, pero hay circunstancias difíciles que les impiden estar juntos plenamente, aquí sí es sensato luchar y esforzarse, porque sientes y tienes la absoluta certeza de ese amor. La cosa es absurda cuando te dejan claro que no te aman e insistes que así sea.

Si el amor que sientes no es correspondido, transforma ese sano sentimiento en gratitud, deséale siempre lo mejor por despertar en ti dicha emoción y retírate dignamente. Respeta su decisión porque por más doloroso que sea, es imposible que todas las personas nos quieran y nos acepten.

 

 

Lo único que queda es analizar qué tipo de “amor imposible” estas viviendo, si vale la pena realmente o no luchar por hacerlo realidad, existen miles de casos que se transformaron de amores imposibles a amores posibles. Si esa persona bien lo vale, no la dejes en el aire, todavía no es imposible, sigues en la carrera, atrévete a dar un paso hacia delante, el pesimismo y la falta de valor no te llevarán a ninguna parte. Así que nada está perdido.

Si no te aman, no ruegues ni te arrodilles. El amor no se suplica ni se exige, solo acontece. Y si no ocurre, te retiras dignamente, y a otra cosa. -Walter Riso.

Autor: Karla Galleta