Dedicado a la persona que me hizo tan feliz, pero también me lastimo como nunca nadie lo había hecho

0
24802

En el momento en que permaneciste en mi vida yo era la persona más feliz de este mundo porque en ti encontraba todo aquello que yo tanto buscaba. No sabía como expresar lo importante que eras para mí y lo mucho que te amaba. Estoy segura que en ese momento estaba dispuesta a entregar lo que fuera, hacer lo que fuera necesario para hacerte feliz. En ese momento no me hubiera importado perder hasta la misma alma con tal de que ese momento no terminará jamás. Lo único que quería en ese momento era detener el tiempo para poder permanecer a tu lado por todo lo posible porque sabía que si llegará a perderte de mi vida no sabría que es lo que pudiera hacer sin ti. Gracias a que el tiempo paso pude comprender que vivía en una fantasía que no podía notar con todo el amor que tenía por encima.

No sabía que sería de mi mundo si yo no te tendría a mi lado; no podía imaginar mi vida sin ti porque te habías convertido en algo que me hacía falta para poder seguir adelante. Lo peor de esta historia es que no podía notar lo perdida que me encontraba porque el amor lograba cegarme y no me permitía ver lo que realmente pasaba con nosotros dos. Fue lamentable el darme cuenta de todo el tiempo que había perdido pretendiendo que todo estaba bien porque me encontraba con la supuesta persona con la que pasaría el resto de mis días, porque eso era lo que yo quería. Yo quería poder pasar el resto de mi vida contigo porque pensaba que eras el hombre de mi vida, alguien diferente, todo eso que había buscado desde hace tanto tiempo y en un solo momento de mi vida se presenta para hacerme feliz de por vida. Después, pasa el tiempo y comienzo a ver que las cosas no eran como lo pensaba, que las cosas no sucederían conforme a lo que había planeado.

Me dolió darme cuenta de las cosas habían terminado entre tú y yo. En un principio de tu partida sentí que mi mundo se derrumbaba, que ya no podía ni quería seguir más porque se habían ido mis fuerzas de seguir junto contigo, porque estaba tan erróneamente cegada que no me podía dar cuenta que en realidad me hacías daño, que todas las ideas e ilusiones venían solo de mis deseos, pero nunca de un fundamento dentro de la realidad.

Sigo esperando a olvidarte y poder encontrar a una persona que pueda tomar tu lugar por fin y hacer que l dolor desaparezca para siempre. Sigo aquí a pesar de que sé que no vale la pena seguir esperando en el mismo lugar, a pesar de que sé que no volverás porque no vale la pena hacerlo, por más que me duela, por más que lo desee ambos sabemos que lo mejor es que estemos de esa manera, separados, porque quizá sea lo correcto, porque quizá así esta escrito para ambos y solo no quería aceptarlo.