Inicio Blog Página 8

No me gusta extrañarte. Ya no quiero tenerte dentro de mí

0

Qué alguien me diga que es lo que tengo que hacer para evitar el dolor que una persona me dejo clavado en lo más profundo del alma porque me enamoró y al final todo se destruyo. Qué es es lo que tengo que hacer para olvidar todos esos momentos que por las noches me recuerdan su aroma, sus caricias y sus besos. He intentado ignorar cada uno de mis pensamientos, pero sin lograr poder decirle que no al amor y al dolor que llevo por dentro. Las noches se ha vuelto eternas y sin poder conciliar el sueño, porque las imágenes de todos esos momentos que pasé a lado de esa persona me hacen despertar de un solo golpe, sintiendo un ardor en el pecho y un vació en el corazón que no me deja volver a dormir.

No sé que es lo que tengo que hacer para poder dejar de extrañarte y hacer como si nunca hayas estado dentro de mí vida, como si nunca te hubiera entregado todo, todo lo que soy para al final decirte adiós. Me dueles aún y estoy cansada de esta situación. No sé de donde tengo que sacar el coraje necesario para olvidarte y dejar de extrañarte de la manera en que lo hago. Ya no quiero tenerte dentro porque eres pesado para mi alma, porque la agobias y la llenas de sentimientos innecesarios. Mi alma quiere descansar, quiere encontrar esa paz que por tanto tiempo no encuentra desde el día en que me abandonaste e hiciste que mis días fueran insoportables. No entiendo porque nos enamoramos de las personas que no son adecuadas… ¿quién es quien lo permite? Quiero saber como le hacen todas esas personas que han pasado por relaciones que no han funcionado y de una manera tan sencilla, van y se regocijan en los brazos de alguien más. Yo lo intenté, intenté ir a los brazos de otra persona, pero la verdad es que sigo pensando en ti porque sé que el amor que te tengo es verdadero, pero tengo miedo de que sea eterno.

Tengo que encontrar la manera de poder decirte adiós y dejar que mi alma tome un descanso para poder buscar a la persona correcta. Aún tengo esperanzas y no quiero que mueran junto a mí, quiero que sigan siendo ellas quien me mantienen con vida. En ocasiones puedo ver la luz del sol sin perderme en su luz, sin quedar deslumbrada y comienzo a pesar en una posibilidad de sacarte del corazón. Después llega la noche, las noches llenas de melancolía que no me permiten acercarme a una razón, a un pensamiento positivo que me aleje de los recuerdos que pasé contigo. Me pregunto cada día cómo estás y con quien es que estás. Me lastimo a mí misma intentando descubrir si has encontrado a alguien más a quien le podrás entregar el amor que tango deseo que me entregues a mí. Quisiera que alguien me dijera que nunca te conocí, que nunca viví lo que por las noches se convierten en pesadillas y lagrimas interrumpidas.

Vete sin hacer ruido

Cuando te vayas, evita buscar culpables. No digas todo lo que nos faltó y todo aquello que se esfumó. Guarda silencio en señal de respeto y traga tus excusas para escupirlas allá afuera. Si eliges marcharte es porque ya todo se ha dicho, porque se superó el límite de paciencia y ya no queda más por hacer, y si no hay nada por hacer ¿para qué decir más?

No te sientas culpable ni esperes a que yo sienta culpa, somos humanos, fallar es parte de lo que somos. No esperes que te busque y no busques regresar después, porque probablemente ya no estaré aquí. Y no digo que será fácil aspirar tu aroma de la almohada cada mañana y darme cuenta de que no estás, pero si has elegido irte es porque ya no hay nada que salvar.

No tambalees, sé que tampoco es fácil para ti, pero si esto es lo que quieres nada de mí te frenará. Aprieta los ojos e inhala fuerte para armarte de valor, sacude los recuerdos, abandona las promesas y sal de aquí con la frente en alto como si fueses a comerte el mundo; hazte el fuerte como siempre acostumbras y no regreses la mirada.

Cuando te vayas, no des explicaciones. Tampoco esperes a que te tome del brazo y te pida entre lágrimas un intento más. Llévate todas tu cosas, no dejes nada aquí; llévate también los recuerdos y tus manías. Llévate todo lo que me pueda recordar a ti.

No sientas tristeza por mí, te aseguro que saldré adelante y haré todas aquellas cosas que siempre soñé. No creas que perderé todo tras tu partida. Y claro que dejarás algunos destrozos, pero nada que el tiempo y amor propio no puedan arreglar. Hay mucho de mí que no conoces, y te sorprendería saber lo fuerte que soy.

Por último, cuando des el primer paso fuera de aquí, recuerda muy bien que no habrá marcha atrás. Tan pronto como salgas de mi vida, yo volveré a comenzar. Camina a paso rápido y no busques saber de mí, porque yo no querré saber de ti. No será rencor ni orgullo, sino ganas de permanecer feliz.

Vete despacito y sin hacer ruido. Para cuando amanezca, mejores cosas llegarán.

Escrito por: Mayeli Tellez 

Mi historia comienza como todas, completamente enamorada y viviendo mi propio cuento de hadas.

0

Fuimos amigos un tiempo largo, ambos estábamos en una relación con alguien más y a pesar de que nos llamamos mutuamente la atención ninguno intento nada.

Pero un día, después de muchas risas, consejos, historias, paso. Eran ya tan fuertes las ganas de que pasara algo más que decidimos intentarlo.

Sí, sé que estuvo mal, sé que me dirán que estábamos lastimando a alguien más, dos personas más para ser exactos, pero, aunque suene a excusa, aunque suene a que es la misma historia de todos los infieles, quiero contarles que las relaciones que ambos teníamos no estaban bien desde mucho antes de que coincidiéramos en el camino.

Fue algo verdaderamente hermoso, jamás en mi vida me había sentido tan atraída física, sexual y emocionalmente por alguien, sentí que a él le pasaba igual y eso hacia que fuera mágico.

No sé qué sentí, todo ese tiempo extrañé cada beso, cada caricia, cada palabra, cada gesto, para ese entonces yo también había terminado ya mi relación, como ya les había contado eso llevaba ya tiempo mal, pero esa es otra historia, por fin éramos libres para amarnos, para cuidarnos, apoyarnos, consentirnos, llenarnos de felicidad y eso fue lo que hicimos.

Fuimos por un largo tiempo una pareja envidiada, en el buen sentido de la palabra, en verdad se nos notaba lo mucho que nos amábamos, siempre queríamos estar juntos, hacer todo juntos y ese fue el problema.

Yo seguía completamente enamorada, por primera vez en mi vida me sentí completamente feliz, a mi nada me faltaba estando con él. Pero para él las cosas empezaron a cambiar, ya no disfrutaba tanto el tiempo conmigo y empezó con el cuento de que cada uno necesita su espacio.

Quizás sí, es cierto, en las relaciones de pareja es necesario que cada uno tenga sus propios amigos y sus propias actividades, pero a mí esto siempre me genero cierto malestar, por egoísmo, por insegura o porque simplemente yo no sentía esa necesidad.

Aún no se bien que paso, en que momento mi cuento de hadas se convirtió en peleas, celos, malos tratos, infidelidades, porque sí, eso paso.

Muchas de mis amigas al inició de mi cuento de hadas, me preguntaron cómo podía confiar en alguien que le fue infiel a alguien más estando conmigo, que de seguro me iba a hacer lo mismo a mí, pero siempre pensé que pensar eso de él, sería asegurar que yo también se lo haría, que el también tendría que desconfiar de mí y yo sabía bien que jamás lo haría, que jamás haría nada que destruyera mi cuento feliz.

Pero cuando él empezó a pedir su espacio, yo empecé a estar siempre de mal humor y quizás eso fue lo que hizo que él buscara paz en alguien más.

Ya nos hemos separado un par de veces, ya he intentado dejarlo en el olvido, ya no queda mucho de ese cuento de hadas.

En mi solo hay tristeza, frustración, decepción; en él indiferencia, desamor, reproches.

Pero seguimos estando juntos y solo hasta ahora entiendo por qué.

¿Quién no aprovecharía?

Quisiera poder terminar diciendo que llegué al final, que aprendí a valorarme y a alejarme de quien no valora mi presencia, mi amor.

Pero no es así, lo cierto es que para poder escribir el Fin se necesitan fuerzas, fuerzas que aún no tengo, pero estoy segura que cualquier día, será el día que me levante y diga no más, porque ya no espero nada de él, solo esperó de mí, poderme convencer del valor que tengo, que no lo necesito, amarme más a mí que a otros.

Y entonces ese día por fin será el Final Feliz de mi cuento de hadas.

Por: Lau TM

No fuimos nada, pero dolió como si lo hubiésemos sido todo.

0

Llegaste un día en el que después de mucho tiempo me atreví a salir otra vez, me atreví a reír y decidir que quizás ya era hora de dejar atrás mi auto-exilio y enfrentar el mundo real.

No sé bien como comenzó todo, solo sé que empezó a avanzar y yo no podía creer que fuera real, acostumbrada a que las aventuras de una noche quedaran solo en eso, te presentaste como un hombre distinto, atento, cariñoso, simpático y con ganas de conocerme. ¿Cómo después de sufrir tanto no iba a caer ante todas esas cualidades? si bien tuve mis dudas, decidí arriesgarme y dar el paso que antes jamás me habría atrevido a dar.

Así fue como poco a poco nuestros encuentros eran más recurrentes, buscaba la forma de siempre estar disponible para el momento en el que tú quisieras estar conmigo, me hacías sentir bien y eso para mí ya era casi un lujo. Volví a sentirme linda y como nunca antes deseada, empecé a pensar que todo pasaba por algo, que ya no era tan malo todo lo anterior, que la vida seguía y ¡miren como estaba!, había pasado de llorar todas las noches a disfrutar cada una de ellas.

Sin embargo, el destino quiso otra cosa, y cuando decidiste actuar por tu instinto y demostrarme que el corazón siempre se puede romper un poco más, me hiciste tener la peor noche de mi vida, noche que si aún me concentro puedo recordar con lujo de detalle, aunque lo que más quisiera fuera olvidarla. Porque esa noche no te bastó solo con estar conmigo, mi cuerpo no fue suficiente para ti, mi alma no lo fue, y te fuiste a buscar en otra la saciedad que necesitabas, porque finalmente sólo fui eso para ti, un recipiente donde vaciar tus deseos.

Llegaste en el peor momento de mi vida, y lo convertiste en uno aún peor, pero entre medio me hiciste feliz, no era tu propósito, pero lo lograste, lograste que volviera a enfrentar el mundo, y darme cuenta de que sigue por más que yo me pare y que a pesar de todo es mejor vivirlo. Porque, aunque ahora tenga el corazón y el alma rota, aunque lamente mil y una vez haber vuelto a caer, esta vez sí que me preparó para lo que vendrá.

Porque si siendo nada me dolió como si lo hubiésemos sido todo, el día que llegue alguien con quien sí sea todo, lo disfrutaré tanto que el dolor que siento ahora será como si siempre hubiese sido nada.

Por: Rocío

La locura de una persona cuerda

0

Una amiga me dijo hay muchas maneras de conocer gente nueva, muchas aplicaciones para usar desde el celular, yo lo pensé mil veces, pensando lo peor. Qué tipo de gente estará en esas aplicaciones, con la cantidad de peligros que corren las mujeres hoy en día no era algo que me entusiasmara demasiado. Pero un día descargue una aplicación y comencé hacer amigos. «Nuevos» amigos, si entre comillas.

Esta aplicación te mostraba las personas con la que te cruzabas y también la tenían. Al principio me di cuenta que varios vecinos estaban ahí, luego gente del trabajo, del súper, de todos lados… Me dio tanta vergüenza que todos me vieran ahí que la elimine duro muy poco mi inquietud. Una mañana aburrida decidí abrirla nuevamente, esa noche tuve una cena laboral, en un restaurant. Al día siguiente en la mañana entro a la app y veo que me había cruzado con un chico muy apuesto la noche anterior. Le di like y él ya lo había hecho. Asique comenzamos a chatear hablando de todo un poco, las preguntas más normales y frecuentes cuando conoces a alguien. Nos pasamos los celulares y empezamos a hablar por mensajes, él tenía algo especial. Así pasaron dos días hasta que me invito a cenar, yo ponía peros, excusas, tenía miedo no lo conocía

Él dijo tranquila no soy asesino ni violador, solo quiero conocerte. Mmmm acepte, esa noche les avise a todas mis amigas, todas dándome consejos, no hagas esto, lo otro, no vayas a ningún otro lado, si es sospecho nos llamas si pasa algo avisa y así solo me transmitían más miedo. Fue una noche mágica, reí más esa noche que los últimos tres meses. Cenamos, hablamos, y fuimos a su casa, si cosa que prometí a mis amigas que no haría. Pero lo hice. Tomamos algo y hablamos tanto, pero tanto que de repente eran las 6 am. Decidí ir a mi casa. Desde ese no dejamos de vernos, él es especial, está hecho para mí, es la persona ideal, creo que hasta su perfume huele al amor de mi vida. Así cometiendo la mayor estupidez, porque podría haber salido mal, con inconsciencia y locura conocí al amor de mi vida. Fue la locura más hermosa que he cometido. Ahora las cometemos juntos

Por: leona

Para el que vendrá a Amarme

0

He oído decir a muchas personas que el amor lo supera todo, lo supera todo y lo supera todo; que el amor se hace más fuerte cuando superan los obstáculos que pone la vida, he oído que incluso la distancia no es motivo de separación, que cuando se ama de verdad con todo el corazón no importan todas aquellas situaciones que puedan separarlos, porque el amor siempre triunfa sobre el mal; también he oído decir que quienes están destinados por fuerzas celestiales a estar juntos, lo estarán aunque estén en constantes ataques, que no hay fuerza humana que pueda separarlos por que los une un poder superior.

¡Entonces!  es allí cuando pienso ¿porque no he podido ser feliz con nadie? ¿será que no hay hombre para el cual amarme solo a mi sea suficiente? ¿o es que tan sencillamente no nací para amar, para vivir en compañía, para formar una familia?

Más que estar así pensando todo el tiempo, formulándome preguntas sin respuestas, imaginándome cuentos de hadas, creando frases de amor que nunca dedico, diseñando al hombre ideal, al hombre de mis sueños, al hombre que quiera pasar el resto de su vida a mi lado, con el que pueda vencer miles de batallas por mantenernos juntos, aquel hombre que no le tema a los desafíos, que luche por estar junto a mí, que me ame, aquel al que yo pueda amar sin límites, aquel hombre para el cual todos mis defectos sean gratas cualidades, que no se sienta insatisfecho cuando este a mi lado.

Pero al fin y al cabo solo son ideas, sueños, horas perdidas imaginando todo este que sé que nunca pasara; no quiero seguir así, haciéndome más daño cada día, acabando con mi propia vida poco a poco; y es que como puedo esperar que alguien llegue a amarme locamente, cuando ni yo misma puedo amarme por todos, cuando ni yo misma puedo ser capaz de ser feliz por mi cuenta; ya no quiero vivir en ese letargo que me permite pensar en todas esas cosas, para nada, porque lo único que hago es entristecerme.

“De hoy en adelante aprenderé a vivir sola, estando realmente sola, para aprender a quererme, a amarme, a darme el lugar que merezco, a aprender lo que valgo; de hoy en adelante dejo todo aquello en el pasado, dejo las largas horas de imaginación, para empezar a vivir días reales, llenos de vida, de emoción, de pasión, sin perder mi verdadera esencia, mi espiritualidad, aquello de lo que estoy realmente hecha, con la esperanza de que en algún momento, no muy lejano, llegue la persona ideal a mi vida, pero mientras tanto viviré cada momento como si fuese el último, “viviré cada día con los pies en la tierra, con ilusión, con creatividad, con pasión, con calma, y sobre todo con amor, con profundo amor, todo el que acumulare para ti, para ti que vendrás, porque sé que vendrás”.

Por: Withnne Theyllor

Olvida lo eterno

No somos eternos. Para suerte del mundo y desgracias nuestra, este recorrido es casi tan fugaz como un parpadeo. Aprendemos con esfuerzo y con caídas para alcanzar aquel ideal que nos forjaron y al que dimos forma, creyendo que al fin comprenderemos aquellos cientos de cosas que terminan siendo cada vez más confusas. Y esa ha sido mi vida, pensar de más todo lo simple y bifurcar mi ideología entre conceptos contradictorios. 

He creído en lo infinito mientras limito mis expectativas. He soñado con querernos siempre mientras me preparo para el final inminente. Y no es que desee verte partir, pero me he obligado a aceptar todo lo que venga y a comprender que a fin de cuentas somos humanos; equivocarnos, herir y marcharnos es parte de lo que somos.

Y el tiempo podrá quitarme todo, menos las experiencias que he vivido. Todo menos los aprendizajes, el fantasma de las sonrisas que adornaron mi rostro y cada emoción que me hizo enchinar la piel. El tiempo puede quitarme la piel lisa, la espalda recta y la fuerza del cuerpo, puede quitarme también algunos recuerdos, lugares, cosas y personas… pero no cada experiencia aferrada al cuerpo que me ha hecho ser como o soy.

Es por eso que te pido más. Algo más que prometer amor eterno y comernos a besos después del atardecer, algo más que planes futuros sin bases sólidas o la obligación de decir al menos un Te quiero al día. Todo eso solo endulza el oído y se va con el aire como partículas de polvo. Quiero más y no hablo de compromisos, no hablo de juramentos. 

Quiero conocer tus historias, miedos e ideas. Quiero escuchar tus pensamientos hechos palabras, que me asombres y  me hagas replantear la forma en que veo ciertas cosas. Quiero saber lo pasa por tu cabeza, por más ridículo o cruel que sea. Permitirnos ser tontos, ser vagos, ser jóvenes. Tener miedo, llorar y después reírnos. Ser reales y sentir que sea lo que sea que pase con nosotros, no habrá nada que nos quite lo que vivimos. 

Y aunque el amor acabe o la vida nos destiña, aunque el maldito mundo apunte con el dedo o cientos de kilómetros nos dividan, ¡aunque nosotros mismos nos demos la espalda y no queramos volver a vernos!, nuestra historia permanecerá ahí, en algún rincón de la mente y alguna parte del pecho. Quizá no más infinito que el universo mismo, pero sí tan fuerte en medida de lo que somos. 

Olvida lo eterno, dame algo real; después de eso, te marchar.

Escrito por: Mayeli Tellez

Me gusta soñar contigo, pues solo así me siento cerca de ti 

0

Por las noches, antes de conciliar el sueño intentó llenar mi cabeza de pensamientos que hablen de ti, tratando de esta manera esforzar a mi mente a soñar contigo durante la noche. Tengo una obsesión al ir a dormir y es mantenerte en mis sueños porque es la única manera que me puedo sentir cerca de ti. No me quiero alejar de ese momento en el que logro atraerte y sentirte cerca, pretendiendo que lo que veo contigo dentro de esos sueños son verdad, que estás cerca de ti y que por lo menos por esos segundos tengo la oportunidad de ser tu amiga, tu amante y tu compañera de aventuras.

Todo lo que quiero al dormir lo tienes tú. Eres tú quien me da el descanso necesario mientras sueño, pues me entregas alegría, ilusión y la esperanza de que quizá en algún momento de nuestras vidas podremos estar juntos y que harás que todos mis sueños sean cumplidos. Grecias por existir; gracias por acercarte a mí de esta manera y permitirme tenerte en mis sueños e ilusiones.

Sueño contigo cada noche y me haces sentir amada en cada uno de ellos, algo que sé que fuera de los sueños jamás podré tener, porque no he podido convencerte con lo importante que eres para mí. Sé que no puedo obligarte a sentir algo hacia mí; que no puedo obligarte a mantenerme en tus sueños como yo lo hago por las noches.

Me gusta hacerlo, me gusta jugar con las imágenes, con tu cuerpo y con tus palabras, intentando atraerte de una manera misteriosa, de una manera que solo en sueños puedo lograr. Me dueles saber que al despertar ya no estarás y que todo el mundo que construí a tu lado solo fueron sueños y que ahora están rotos porque no estás a mi lado, porque no puedo sentirte de la misma manera y lo mejor es comenzar a dormir de nuevo intentando encontrarme de nuevo contigo en una nueva aventura, llena de amor, de misterios y de felicidad. Aunque no te mentiré, en ocasiones mis sueños se tornan en pesadillas, cuando mi mente se coloca un poco los pies en la tierra, cuando recuerda que la verdad es que estás lejos de mi alcance y que tengo que entenderlo hasta en mis sueños.

Me encanta soñar contigo y mantenerte cerca, crear historia y sentirte a pesar de que te encuentras lejos de mí. Quisiera que cada uno de los sueños se cumplieran y que nunca más te fueras de mi vida. Quisiera estar en tus sueños y hablarte, estar cerca de ti y demostrarte por medio de ellos lo mucho que me importas y lo mucho que me encantaría pasar mi vida a tu lado. No quiero perder lo que tengo llenando mi cabeza de ilusiones y sueños, menos cuando tú estás en ellos y eres alguien diferente en cada uno de ellos. Me gusta cada una de las aventuras y me encanta pensar que esos besos y tus brazos realmente me tocan.

Aprendí que ahora yo soy quien debe ignorarte

0

No sé, no entiendo como fue que pude llegar a esta conclusión. Llegar a pesar que lo que hacía estaba bien, que el permanecer a tu lado hasta que ese dieras cuenta de lo que realmente valgo valía realmente la pena. Ahora voltea hacía atrás y puedo ver lo que era antes, lo que era cuando estabas cerca y lo que era en cada una de las noches después de llegar a casa y darme cuenta recordando todas las palabras que me decías y que me demostraban que realmente no valía nada para ti. El recordar lo que hacías y me decías para hacerme entender que ya o sentías nada por mí ya no duele más. Ya no es como antes, ya el dolor no tiene dominio sobre mí y soy realmente capaz de decirte adiós para siempre, demostrando que estoy mejor sin ti y que las cosas jamás volverán a ser lo que eran antes.

Ya no me importa, ahora puedes irte las veces que quieras, y si quieres volver tampoco me importa, porque realmente con el tiempo aprendí que lo mejor es que ahora sea mi turno de ignorarte y hacer todo lo que hacías al dirigirte a mí de esa manera tan hipócritamente confundiendo mis sentimientos y mi mente.

No podrás hacerte una idea de todo el daño queme hiciste y nunca podrás imaginarte todas esas noches en las que las lagrimas no dejaban de salir de mis ojos, derramándose en mi rostro, en ese rostro que se encuentra cansado, enfadado y muy dañado por tanto llanto. Me hubiera gustado, no te  mentiré, me hubiera gustado que te hubieras dado cuenta de lo mucho que valía y lo mucho que estaba dispuesta a entregarte con tal de que me dieras una oportunidad para demostrarte lo importante que eras para mí. Pero en cambio, en cambio me engañaste y me despreciaste sin sentimientos ni compasión y a través del tiempo pude darme cuenta que no vale la seguir a lado de una persona que no me valora, porque si no me valora entonces no vale la pena estar ahí para esa persona. Es tiempo de ignorarte y me gustaría regresarte cada uno de los dolores que por las noches realmente atormentaban mis sueños y mi alma.

No quería seguir, no tenía las fuerzas suficientes para seguir. Sabía lo que hacías, cada uno de tus movimientos porque tuve tiempo de observarlos, tuve tiempo de darme cuenta que al final de cuentas ya no sentías lo mismo por mí, que las cosas sin darme cuenta y sin entenderlo habían tomado diferentes rumbos. No sé como le haré para seguir adelante sin ti, pero puedo prometerte que aunque me cueste mucho trabajo intentaré seguir adelante, porque no vale la pena ir detrás de un hombre del cual no sacaré el provecho de ningún tipo de aspecto. Prefiero mejor seguir esperando aprovechando el tiempo para mí misma que ir detrás de una persona que no valora lo que soy y lo que seré.

Estoy cansada de ser yo quien llore por las noches 

0

¿Cuántas veces más te burlarás en mi cara? Han pasado muchas veces en las que has jugado con mis sentimientos, mostrándote cariñoso, amoroso. Me mentiste muchas veces y al ver que yo aceptaba tu partida sabiendo que era lo mejor porque me habías hecho sentir con la responsabilidad de cuidar a mi corazón. Lo mejor es que te vayas si aquí no quieres estar, porque mi corazón ya no da para mas, ya no puede seguir adelante pensando que en cualquier momento dirás que te irás y me dejarás con todas las ilusiones y sueños que has construido en mi corazón.

Perdóname por no haberte dejado ir desde un principio, por no darme cuenta que lo único que querías, lo único que necesitabas era estar lejos de mí, no sentir que tienes el compromiso de pasar tus días conmigo y tener que soportar estar a lado de una persona a quien no amas. Quiero decirte que eres libre, que no te preocupes por mí porque estaré bien, quizá me costará algo de tiempo olvidarte y hacer entender a mi corazón que ya no estarás más a mi lado.

Tenemos que aprender a decir adiós aunque sea lo que nos hace feliz, aunque sea lo que más amaremos en esta vida, porque la verdad es que no podemos permitir perder nuestro tiempo con personas que no se merezcan estar en nuestra vida, personas que nos llenen el alma para después destrozarlas. No es justo que estemos a lado de una persona no valore el tiempo que se le entrega con amor, a pesar de que ese amor no sea correspondido, pero es que la verdad en ocasiones una persona enamorada no se puede dar cuenta cuanto entregamos sin recibir nada a cambio.

El tiempo ha pasado y sé que es el momento que yo deje de llorar por las noches y que comience a dejar que esas lagrimas se sequen y que cada una de ellas se convierte en sonrisa. Quiero volver a ser feliz y quiero entregarme a una persona que pueda valorarme y regresar todo lo que yo le entregué. Ahora puedo dormir tranquila y cada vez que los pensamientos y recuerdos, solo recuerdo lo mal que la pase los últimos días, cuando me di cuenta de que ya no éramos felices a pesar de que yo te amaba con toda el alma, pero es que mi corazón no soportaba tenerte a mi lado sabiendo que el amor que tenías por mí se fue apagando hasta quedar seco tu corazón. Ahora lo sé y acepto tus decisiones y respeto tus sentimientos, es por eso que te deje ir de mi corazón y deje a mi mente que tus recuerdos los dejará en el lugar más escondido de mis pensamientos, para no atraerte y que las heridas que dejaste en mi corazón vuelvan a sangrar y de nuevo el dolor vuelva. Tengo que dejar de ser yo quien tiene que dejar de ser yo quien llore por las noches y comience a ser feliz por siempre, colocándose antes de cualquier otra persona

Después de mil tormentas llegó mi calma… llegaste tú

No han pasado años, solo algunos meses desde que lo conocí. Y aun así no recuerdo lo que era mi vida antes de él.

Todo lo que soy y lo que no soy, todo en lo que me he convertido ha sido por él. Toda mi estructura fragmentada y mi corazón roto en mil pedazos se han regenerado por él.

No recuerdo donde empiezo y dónde acaba él o viceversa. Hoy solo sé que le pertenezco. Ni siquiera puedo recordar quién era yo antes de él. Sólo me recuerdo en un profundo pozo oscuro. Sola y vacía. Pidiendo rescate a sabiendas de que por más que gritara nadie me escucharía. Me recuerdo quizás sosteniendo pedazos de mi historia en una mano y en la otra ilusiones fallidas, rotas, tan o más rotas que mi corazón.

Aparece él. Inesperadamente. Sorpresivamente. Con su encanto y su nobleza. Con esa chispa de diversión en sus pláticas. Con esa fe y nobleza a flor de piel. La caballerosidad que todas deseamos encontrar pero que pocos poseen ya.

Aparece arrasando con todo lo malo a su paso. Iluminando aquel maldito pozo que me consumía en la soledad. Aparece con su gran sonrisa. Con palabras gentiles y sus tiernos detalles.

Con los días me saca de donde me encontraba. Me muestra otro mundo. Me hace comprender los días. El tiempo. La vida. Me hace valorar. Valorarme. Vuelvo a creer no sólo en mí. Sino también en alguien más. En él. Ni siquiera puede imaginarse todo lo que ha logrado en mí. El sinfín de colores que me ha enseñado a descubrir y con los que he pintado mi mundo.

No me imagino sin él. No me quiero sin él. No sabría a dónde ir. Me aterroriza perderlo. Perder el maravilloso mundo que ha creado para los dos.

Soy feliz. Tan feliz como nunca antes lo había sido. Hoy la palabra ¨amor¨ tiene el significado que nunca antes le había dado. Hoy despierto y sonrío al recordar que lo tengo conmigo. Que me ama como nadie más lo había hecho.

Y vuelvo a tener seguridad en mi persona. Puedo mirarme al espejo y sonreír. Mirarme y gustarme. Y aunque en repetidas ocasiones me he mostrado insegura, lo cierto es que me basta escucharlo a él para que toda inseguridad pierda su valor.

Que equivocada estuve al pronunciar antes un –te quiero-. Al elegir a personas erradas que al final sólo me llevaron a sumergirme en aquel pozo. Y aun así, de nada me arrepiento. Porque repasando lo poco que recuerdo de mi pasado llego a la conclusión de que lo vivido tuvo que suceder para llegar a él. O él a mí. No lo sé. Pero me salvó. Me sanó y me ha cuidado todo este tiempo, incluso de mi misma. Soy tan afortunada de que me haya elegido. Soy tan afortunada de que una y otra vez decidiera quedarse conmigo a pesar de mis fallos, de mis miedos y de las tontas pruebas que le puse una y otra vez y que al final siempre superó.

Ahora todo mi presente se encuentra estable. No existen más aquellos fantasmas. Mi dicha se la debo netamente a él… mi hombre ideal. Él que sin tocarme me hace sentir como nadie más. Él que sin mirarme me hace suspirar. Él que con su voz eriza cada parte de mi piel. Él que estando tan lejos me hace sentir un amor tan grande, tan puro y tan verdadero, que nadie más ha de tener.

Lo amo, cómo solo él pudo enseñarme… y después de mil tormentas llegó mi calma, llegó él. 

Autor: Stepha Salcas – Diario De Una Bipolar

Derechos de Autor.

A veces el amor y la amistad se cruzan y a alguien le toca sufrir.

0

En realidad nunca tuve la intención de enamorarme de ti, pero cuando lo veo un poco en perspectiva creo que puede ser no tan raro enamorarse de un buen amigo en realidad, porque si me pongo a listar las cosas que considero importantes en una relación puedo decir que serían: la confianza, el conocimiento mutuo, la sinceridad, una buena comunicación, un interés total en el bienestar de la otra persona, el valor para decirle a la cara a la otra persona cuando se está equivocando y que te lo digan a ti también, y sobre todo mucho pero mucho cariño.

Como vez sin siquiera quererlo, pareciera que estoy describiendo nuestra relación, fue hasta hace poco que me di cuenta de los cambios que habían surgido en mi corazón, al principio no quería aceptarlo, creía que era una loca idea que se había plantado en mi mente por capricho, pero con el paso de los días esa realidad se ha vuelto innegable y creo que es momento de decir la verdad y de afrontarla sin importar las consecuencias, te lo debo precisamente por esa sinceridad que siempre ha existido entre nosotros.

No espero que en realidad seas capaz de corresponderme, solo creo que debes saberlo y que quizás sea una remota posibilidad pero viable en la que tu pudieras estar pasando por lo mismo que yo, si no puedes verme como alguien más que una amiga lo voy a entender, solamente quería sacar todo esto que siento y como eres mi mejor amigo, a quien siempre le cuento todo lo que me pasa, lo que me preocupa y lo que quiero, pues como siempre te quiero contar esto que ahora siento, aunque ahora el protagonista de mis sentimientos no sea un desconocido, si no tú mismo.

Quizás en el fondo no sea tan loco enamorarse de tu mejor amigo, porque creo que los novios deberían ser también amigos en realidad, creo que muchas relaciones fracasan porque no son capaces de convertirse en nada más que amantes, pero son cosas sencillas como la comunicación, como el bromear, el poder compartir cualquier idea por más loca que sea y la sinceridad aquellas cosas que realmente mantienen a flote a una relación en los tiempos difíciles, creo que ser amiga de tu novio visto desde esta perspectiva no suena tan loco como al principio se puede ver.

Sin embargo estoy consciente de mi situación y poniendo los pies sobre la tierra creo que mis posibilidades de ser correspondida por ti son casi nulas, y estoy preparada para pagar el precio de haberme enamorado de la persona incorrecta, en esta ocasión no incorrecta por el tipo de persona que eres, sino más bien incorrecta por el tipo de relación que tenemos en la que rara vez se ve una transición a un romance como el que ahora deseo tener contigo, te he abierto mi corazón como siempre lo hago amigo mío, y solo espero a cambio que me contestes con sinceridad como siempre lo haces, así que dime que piensas y no repares en romperme el corazón si es necesario.

Autor: Sunky